Desde hoy se está celebrando en Roma una reunión de los principales jefes de Gobierno mundiales para debatir sobre la crisis alimentaria, la seguridad alimentaria y el efecto de los biocombustibles en la alimentación.
La conferencia ha sido convocada por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) y se puede seguir en directo desde aquí:
http://www.fao.org/webcast/
La emisión no está traducida, de manera que las ponencias de las diferentes personalidades se escuchan en sus respectivos idiomas.
Hasta el momento hemos podido ver a Lula da Silva, presidente de Brasil, defendiendo los biocombustibles sostenibles producidos en Brasil que se producen a partir de caña de azúcar frente a los biocombustibles producidos a partir de maíz subsidiado. Ha promovido la liberización de los mercados supeditada a la eliminación de los subsidios en los países ricos para no distorsionar el mercado.
Tanto él como Cristina Kirchner, presidenta Argentina, han criticado al FMI por sus políticas (como la recomendada a Haití hace un par de décadas) y han señalado el carácter oligopólico de la distribución como una de las causas de la crisis actual.
Nicolás Sarkozy ha propuesto como estrategia principal el fomentar la agricultura local con crédito y con financiación internacional. Ha defendido también la creación de un grupo internacional de expertos para vigilar la seguridad alimentaria.
El presidente español (presentado como José Manuel Zapatero por Berlusconi), ha resaltado el aumento de la ayuda española y ha criticado a los países que han reducido su ayuda al desarrollo en los últimos años. Ha pedido que se liberalicen los mercados globales tras eliminar los subsidios a los agricultores (Ronda de Doha) y ha propuesto a España como sede en otoño de una nueva reunión.
Veremos qué nos depara la reunión.
**Actualizado 06-Junio-2008 **
Finalmente ha terminado la reunión con la firma de una declaración no muy diferente de otras anteriores y poco prometedora.
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